Solo dos especialidades logran el objetivo del Sergas de reducir la espera a tiempos prepandemia

Elisa Álvarez González
E. Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

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Foto de las urgencias del CHUS, en febrero de este año
Foto de las urgencias del CHUS, en febrero de este año PACO RODRÍGUEZ

Sanidade se propuso sin éxito recuperar en el 2023 los datos del año 2019, la demora media aumentó doce días en cuatro años

23 abr 2024 . Actualizado a las 08:58 h.

A principios del año 2023, la Consellería de Sanidade lanzó un plan de actividad extraordinaria. El objetivo era volver a las cifras de lista de espera prepandemia, cuando se alcanzó uno de los mejores datos de la comunidad gallega: menos de 55 días de media para pasar por el quirófano. El programa incluía más cirugías por las tardes y en los hospitales comarcales, además de otras medidas como revisar en primaria la situación de los enfermos crónicos, uno de los colectivos que más sufrieron los efectos del covid. La previsión era acercarse a las demoras precovid a final del 2023. Pero los objetivos no se cumplieron finalmente. La espera para operarse era a 31 de diciembre del 2023 de 67 días, 12 más que cuatro años antes.

Solo una especialidad ha conseguido mejorar la situación de finales del 2019, según los datos que ha publicado el Ministerio de Sanidad (el Sergas no ha dado a conocer en su página web este informe, pero lo ha dado por bueno en una nota). Se trata de dermatología, que pasa de 48 a 45 días. Otra, cirugía cardíaca, ha logrado volver a las mismas cifras, con 53 jornadas de promedio. El resto de los servicios acumulan ahora más retraso que en diciembre del 2019, cuando se publicaron los últimos datos previos a la aparición del coronavirus, en marzo del 2020. Llaman la atención los casos de urología y neurocirugía. En el primero hay que esperar actualmente 26 días más de media; en el segundo, 34.

Más demora se traduce en más gallegos engrosando las listas. Si a finales del 2019 aguardaban a pasar por el quirófano 35.720, cuatro años más tarde son 45.027, casi diez mil más. Se ha triplicado también el porcentaje de los que esperan más de seis meses, pasando del 0,9 % del total de pacientes al 2,7 %. Son casi un 15 % en el caso de neurocirugía, más de un 6 % en traumatología y un 5,7 % en urología. Galicia es, de todas formas, la tercera autonomía en donde menos usuarios sobrepasan los 180 días, tras Madrid y el País Vasco. 

Las consultas no mejoran

Las cifras prepandemia tampoco se han recuperado en la espera de consultas externas hospitalarias, en donde se ha pasado de los 42 días del 2019 a los 73 del 2023. En este caso, ninguna de las especialidades que analiza el ministerio (diez) mejora sus cifras. La que ha empeorado menos es ginecología, en donde la demora media sube solo dos días, de 39 a 41, pero en otras áreas se ha duplicado, como otorrinolaringología (de 33 a 68) o cardiología (de 35 a 67). Urología, que elevó mucho la demora para operarse, mantiene sin embargo una lista de espera similar en la primera consulta con el especialista, al pasar de 38 a 41 jornadas. Hay más de 212.000 pacientes pendientes de una consulta con el especialista, lo que supone 45.000 más que hace cuatro años.

En este caso, Galicia ocupa la quinta posición en el conjunto de comunidades con la menor demora en citas hospitalarias (73), detrás de La Rioja (54), Castilla-La Mancha (60), el País Vasco (61) y Madrid (67).

El nuevo conselleiro integra el Sergas en el organigrama de la consellería

Más de una semana después de que el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, diese a conocer a su nuevo equipo, sigue habiendo mucha incertidumbre sobre la consellería más potente de la Xunta, la de Sanidade, que gestiona cuatro de cada diez euros de las cuentas públicas. La primera reunión del Gobierno gallego, celebrada ayer, no despejó dudas y, si cabe, generó más incógnitas. No solo no se aclaró nada del segundo escalafón —tras el nombramiento de Antonio Gómez Caamaño como conselleiro—, sino que una escueta frase sembró más dudas: «Nesta nova etapa, o Servizo Galego de Saúde pasa a integrarse por completo no organigrama da Consellería de Sanidade». Es un cambio importante, ya que históricamente el conselleiro está al frente de todo el departamento en la práctica, pero Sergas y consellería siempre han mantenido una estructura paralela.

Esta modificación explica el runrún que ha circulado estos días por los pasillos de San Lázaro —sede del Sergas— y de los hospitales gallegos, que todo el organigrama del Servizo Galego de Saúde, con la gerente Estrella López-Pardo al frente, ha sido cesado. Una explicación plausible es que dejen su cargo en el Sergas y asuman competencias similares en la consellería, toda vez que esta aglutinará todas las competencias sanitarias. De momento, no han trascendido nombramientos en este departamento, del que dependen más de 40.000 trabajadores.